Utilizamos las palabras más por el contexto de donde las sacamos que por su propia definición. Este Trabajo Final de Grado indaga en este contexto desvelando que paradójicamente ningún concepto se describe por sí solo, todo requiere de un entramado; de un espacio para poder ser. Desde esta intención se introduce de modo expositivo, y a través de un recorrido histórico en los diversos campos artísticos las claves sensibles y conceptuales provenientes de una búsqueda interdisciplinar, fruto del análisis expresivo y las cualidades comunicativas de diversos campos, materiales y técnicas. Una investigación que parte de la elección del material y la técnica, la resolución e interrelación rostro-palabra y la revisión del resultado que acaba por unificar todos los trabajos: La idea de lenguaje como signo/símbolo y del rostro como imagen. Produciendo un uso del lenguaje consciente de sí mismo con el propósito de reflejar una identidad (propia). El lenguaje alberga la esencia de quien lo emplea. Habitar y construir.